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jueves, 8 de mayo de 2014

FORMULA DE VIDA 1.-


Cada día antes de acostarte prepara todos los ELEMENTOS para que cuando te levantes los tengas A MANO.

Nada mas despertarte saca  la “VOLUNTAD” que habías dejado la noche anterior en la mesita de noche y ponte en marcha.
Este elemento es muy volátil, además se enturbia y pierde rápidamente sus propiedades, así que cada día debes comprobar su estado y reponerlo, en cuanto coja mal color.

Prepara durante unos segundos el “ÁNIMO” esto lo puedes hacer de una manera muy sencilla, solo utilizando la mente que es un arma muy poderosa y que suele despertarse al mismo tiempo que el cuerpo.

Recuerdo un profesor de química,  Mariñer, que  utilizaba el  “ÁNIMO” de forma muy variada incluso para conseguir formulas diametralmente opuestas.

El profesor Mariñer, era  un tipo curtido en el arte de la preparación de formulas magistrales, el, utiliza solo la variante de “ánimo positivo”.

Creía Mariñer que las otras variantes de ánimo oscurecían demasiado los demás elementos y por ello hacia oídos sordos al resto de colégas cuando le animaban a probar el “desánimo” por ejemplo.
Los resultados de Mariñer siempre eran espectaculares pero también es verdad que Mariñer y sus formulas, no siempre están al alcance de los simples mortales.
Aun así nunca me resisto a no citar al profesor cuando se trata de formulas con “ánimo” decía siempre:
 “No me utilicen otra variante de ánimo…solo; ánimo positivo”.

Por último, en la formula introduciremos el elemento de EMPATÍA para darle el toque final.
Con la empatía  vamos a conseguir que cada elemento este perfectamente combinado y sin casi necesidad  de agitarlo, obtendremos el resultado esperado pues ya es más que conocida la aptitud de ponerse en el lugar del otro
Ojo…!no menospreciéis este elemento!.
La “empatía”  en este caso, la utilizamos con un efecto rebote, un efecto de espejo. Como una capacidad de identificación con la finalidad de esta formula “Que ni la casa ni el trabajo...me coman”

Como contraelemento básico y único apuntamos la DEJADEZ, este es el enemigo más claro de esta fórmula con poco que le pongamos de este contraelemento la arruinaremos totalmente.


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