Dicen que viajamos para huir y que huimos porque tenemos
miedo…
¿A qué?
Bueno eso no lo dicen pero imaginamos que a todo, a estar
atrapados, a no movernos, a seguir igual, a no avanzar, a no estar de moda, a
no culturizarnos…
Como estamos en la época de la sobre-valoración de las cosas,
lo de viajar, lo hemos exagerado tanto que parece que el que no viaja, está casi,
muerto, no cuenta, además no tiene nada que contar…
- ¿A dónde has ido?...
- Me he quedado en casa…
- ¿No me digas?
Es increíble pero es así de tremendo.
En realidad, es una corriente monetaria, que nos ha ido
ganado terreno y que ya es como el móvil…
“No podemos estar sin
programar un viaje”
Pero ojo que los “pensadores” están ya analizando que esto
del viaje, puede ser aditivo y parece que las consecuencias de tanto viaje,
están trayendo problemas de difícil solución.
Por lo visto y como no podía ser de otra manera, ya están
empezando a verle a esto,los rasgos de “Un síndrome” y hasta ya se atreven a
nombrarlo como…
EL SÍNDROME DE "EL VIAJE PERDIDO”
-
¿Quién lo dice?
No tengo ni idea pero parece que es un secreto a
voces o a veces, están ahí, ahí.
Hay gente muy extresada en el trabajo diario porque no ha
podido salir de viaje y le crea, tal ansiedad que no puede conciliar el sueño.
Otros dicen sentirse atrapados en la última salida de manera
que sueñan repetidamente con los mismos museos y excursiones una y otra vez.
Parece que otros están tan concentrados en el número de
cervezas que pudieron digerir que ya no le salen las cuentas y no les compensa
salir con los amigos de siempre a tomarse… UNA???
Vamos “Un síndrome” de los de toda la vida.
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