COMER, ACOMPAÑADO

La verdad es que algunas veces parece que la sociedad, en vez de avanzar, atrasa. Es como un reloj al que se le van agotando las pilas. Empieza perdiendo unos segundo, luego pasan a ser unos minutos y al final un día te despiertas extrañado porque no te ha sonado el despertador y compruebas que se ha quedado anclado en las 5,00h.

Siempre que sucede eso, te preguntas… ¿por qué en esa hora?, ¿por qué hoy, que tenía que ir a mil sitios? ¿Por qué?,¿ por qué?…

Pero no hay respuesta, se ha parado y ya está.

Ahora que estamos todos tan puestos en las nuevas tecnologías, de vez en cuando tendríamos que revisar las cosas cotidianas para intentar que no se nos queden paradas en un punto sin retorno.

Por ejemplo; pensemos en comer...! Es sencillo!

 ¿Quién no sabe comer?

Generalmente los humanos, nos gusta comer acompañados, a veces con la familia, otras con amigos y otras veces con grupos de colegas, o compañeros de viaje, en fin con gente a nuestro lado.

A veces, nos sentamos en la mesa, sin darnos cuenta de que comer, también es una técnica y su buen uso, puede proporcionarnos mayor felicidad. Solo consiste en aplicar unas simples reglas;

1º.- Hay que comer tranquilo/a, sin prisas, y si es “bufet libre”, no hace falta llenar el plato hasta arriba, puedes volver a por más comida…!Es libre!

2º.- Los cubiertos y las copas, las ponen porque las puedes necesitar, así que, úsalos, no te cortes. Pero cada uno para lo suyo.

3º.- No hace falta que utilices las manos para ingerir ningún alimento…! Déjate, de si está permitido!, lo mejor es usar cubiertos, así no te equivocas.

4º.- Si no usas la manos para introducir los alimentos en la boca, no va a hacer falta que te chupes los dedos, uno a uno…!Nunca!

5º.- No ingieras más cantidad de alimento de la que te cabe en la boca, esa operación se puede repetir así que no fuerces las cosas. No  engullas y una vez dentro el alimento, mastica con la boca cerrada…¡Si, se puede!

Por último no grites mientras comes. El de al lado te oye igual si le hablas sin gritar y hablar con el del extremo opuesto en una mesa de 10, no es conveniente… ¡Nunca!.

Comer bien, te da paz.

¡PRUEBALO!