Etiquetas

lunes, 21 de enero de 2013

LA MUDANZA




Cerrar un blog para abrir otro es muy parecido a trasladarse de casa.

Primero se crea en tu interior una necesidad de cambio…en mi caso había empezado a experimentar un sentimiento extraño cuando tenía que pulsar en el icono (lapicito) que te da la opción de “publicar”, entonces sentía lo mismo que cuando te vienen a visitar a casa un par de parientes o “amigos” de  esos que nunca deberían haber venido con la única intención de cotillear y tú pacientemente le vas enseñando las habitaciones una a una pero ellos no hacen ningún comentario ni para bien ni para mal, solo de vez en cuando, hacen una pregunta, como por ejemplo;  ¿y esto es tuyo o heredado?. ..

La ventaja  del blog  es que puedes irte sin necesidad de haber encontrado antes otro que se adapte mejor a tus nuevas necesidades.
En mi caso, fue así, primero, me despedí, lo cerré y luego con calma busque otro lugar o mejor dicho otro nombre con el que identificarme.
Ahora ya estoy aquí, la sensación es magnífica, como cuando llegas a tu nueva casa, y mientras aparca el camión de la mudanza con todas tus cosas, subes y abres las puertas de todas las habitaciones y ventanas y comienza a entrar el sol de nuevo y escuchas el ruido ensordecedor del trafico y respiras hondo y te sientes vivo.

Ahora estoy aquí  para empezar de nuevo; sin  amigos ni parientes imprevistos, sin cómplices vestidos de domingos, sin rencores ni nostalgias solo con ilusión de conocer un nuevo espacio y sentirme libre en él.

No hay comentarios:

Publicar un comentario